sábado, 9 de julio de 2011

Capitulo 2




-hola niñita-dijo una voz de mujer, me di vuelta y había una señora de pelo rojo y ojos… rojos?? Me incomode bastante
-que necesita señora?-pregunte cortés como siempre me ha enseñado mi madre
-solo quiero decirte que tienes que decidirte y decirle antes de que sea tarde, los accidentes pasan-me estremecí por su tono tan maligno, ni siquiera se a que se refiere
-a que se refiere señora?
-tu sabes a que me refiero, hay una sola vida-en eso se hecho a reir como de un chiste privado
-la verdad es que no la entiendo!-dije incrédula
-ustedes nunca entienden nada!
-mejor me voy, gracias por el consejo señora, lo tomare en cuenta!
-puede que cuando te decidas sea tarde, solo piénsalo!
Empecé a caminar cada vez mas rápido, esta señora si que esta loca, pero de igual manera me puso muy nerviosa, me dio muy mala espina

¿porque me diría eso? ¿porque a mi? y además ¿que quería decir con eso?
de verdad me dejo muy confundida y un poco asustada......

Cuando llegue a mi casa entre corriendo y fui hacia las escaleras, quería llegar rápido a mi cuarto, estaba asustada, en shock y muy nerviosa y no sabia porque….

-Bella ¿eres tu hija?-pregunto Rene.

-Si mama soy yo-le dije desesperada por irme a mi cuarto.

-¿Estas bien cariño?-pregunto, agg porque ahora que yo no queria hablar solo queria llegar a mi cuarto.

-Si mama estoy bien, voy a mi cuarto tengo mucha tarea-le dije y me encere en mi cuarto.

-¿Qué abra querido decir esa señora? Y ¿Por qué me tiene tan nerviosa?-me preguntaba a mi misma hasta que me quede dormida.

Cuando me levante ya era por la mañana, revise mi celular y Edward no me había llamado ni siquiera me había mandado un mensaje, aquí pasaba algo raro porque Edward no era así…
Así que cogi el celular y lo llame….
Sono una vez y otra vez pero nada, me mandaba directo al buzón de voz.

-Edward por favor llámame, estoy preocupada y quiero confesarte algo que he ocultado toda mi vida, yo…-y ahí no pude hablar, pero algo me daba la fuerza, algo me decía que se lo dijera y se lo iba a decir pero no por teléfono debía ir a su casa….

- Buenos días mama, voy a salir-dije pasando a su lado camino a la puerta.

-¿A dónde vas tan temprano y apurada hija?-pregunto mi mama.

-A la casa de Edward, voy a confesarle que lo he amado siempre desde que éramos niños, ya no puedo seguir callándolo, algo me dice que debo decírselo y además no se nada de el desde ayer-le dije a mi mama decidida, mas decidida que nunca y desesperada, no sabia porque pero sentía que tenia que ir lo mas rápido…..

-Mama tomare tu auto prestado por favor mama-le pedí o mas bien le rogué.

-No lo se Bella….-dijo pensativa.

-Por favor volveré pronto, lo prometo mama por favor!-le pedí.

-Mejor te llevo bella, es mejor solo por si acaso-me dijo.

-Esta bien mama, gracias-le dije y la tome de la mano y salimos corriendo al carro y le pedí que acelerara, iba lo mas rápido posible pero se me hizo lento y eterno el camino, hasta que por fin llegamos.
Fui a tocar el timbre de la casa pero nadie me abría.

-Edward!, Edward!!!-gritaba pero nadie me contestaba, no podía mas con esto, así que busque la llave que Edward guardaba en una piedra, abrí la puerta y entre.

-Edward….-dije y me puse a temblar por lo que veían mis ojos, había sangre por todas partes y me puse muy nerviosa, desesperada porque si a el le pasaba algo yo me moría porque el era todo para mi.

-Mama! Ven por favor, Edward ¿Dónde estas? por favor contéstame-dije llorando.

-¿Qué pasa cielo?-pregunto preocupada y luego miro toda la sala.

-Oh por dios, ¿qué paso aquí?-pregunto histérica.

-No lo se mama, pero no importa, lo único que importa es Edward, no me contesta no se donde esta!-dije como una loca, ya no me importaba nada, solo encontrarlo y que el estuviera bien, eso era lo mas importante para el, para sus papas que estaban de viaje por el trabajo y sobre todo por mi, porque el era toda mi vida, sin el estaría perdida.

-Bella llamare a la policía-dijo mama preocupada y se fue a llamar a la policia, luego de veinte minutos llegaron.

-buenos días, que es lo que sucede?-preguntaron y mi mama les explico porque yo no podía, porque estaba llorando como loca, luego de revisar toda la casa durante una hora la policía bajo.

-deben estar preparadas para lo pero-dijo el jefe.

-que quiere decir con eso?-les pregunte.

-que todo nos da a que su amigo esta muerto, solo nos falta comprobar que la sangre que esta por toda la casa sea de el y si es de el lo declararemos como muerto, lo siento-dijo y yo me puse a gritar eso no podía ser verdad, Edward no podía estar muerto, la razón de mi vida no puede estar muerto, todo mi mundo lo era el, todo por lo que yo vivía, el era la primera razón, entonces si el estaba muerto, que va hacer de mi? De momento todo me empezó a dar vuelta y todo se puso negro y no volví a tener conciencia.

Unas luces me despertaron, unas maquinas haciendo es horrible ruido, estaba en un hospital.

-Edward, edward-decía débilmente hasta que recobre el sentido por completo.

-OH bella que bueno que ya despertases-dijo mama poniéndose a mi lado.

-mama que paso con Edward? Lo encontraron?-le pregunte.

-no bella lo siento, Edward fue declarado muerto-me dijo llorando suavemente.

-no, eso no puede ser, no han encontrado el cuerpo, como pueden decir eso?-le pregunte gritando.

-porque la sangre que estaba por toda la casa era de el bella, de verdad lo siento mucho cielo-dijo.

-no! Esto no puede ser verdad, el mundo ya no tiene significado para mi-dije llorando, la maquina que cuenta el latido de corazón empezó a subir muy rápido y yo empecé a gritar por el dolor que estaba sintiendo, lloraba y gritaba era lo único que podía hacer en ese momento.

Mama llamo a los enfermeros y vinieron dos y me agarraron a la fuerza y me pusieron un calmante y empecé a ver todo oscuro y a sentirme mareada, de momento ya lo vi todo negro pero no mas negro que el dolor que estaba sintiendo por la perdida de mi amor, de mi Edward. Que iba a ser de mi ahora? Como seguiría viviendo sin el, sin el amor de mi vida? Y si el estaba muerto, yo tambien moriría porque sin el mi vida no tendría sentido……


domingo, 26 de junio de 2011

Primer Capitulo




Cap.1

Escuche unos sonidos, que al parecer venían desde muy lejos, estos sonidos eran acompañados por unas cosquillas en mis piernas, cada vez se iba poniendo mas insistente hasta que logro sacarme un gruñido; lentamente abrí los ojos para encontrarme con mi madre jalándome los pies.

-mama!-proteste.

-tienes que ir al colegio.

-pero es temprano!

-vamos, deja de ser tan perezosa y levántate.

Entonces, de un momento a otro caí al suelo, llevándome todas las sabanas encima de mi.

-Mama, parece que la adolescente de 16 años eres tu, en vez de tu hija!!

-esta bien, Bella, vamos tienes que ir al colegio.

-ya se, ya se, ahí voy!-dije levantándome de muy, muy mal humor.
Me puse el uniforme del colegio, que consistía en una minifalda, con medias hasta la rodilla, y la remera con la insignia del establecimiento.

Baje, y Rene (mi madre) estaba en la mesa con una taza de café en las manos, y frente a mi silla estaba otra, con unas galletas, me senté y desayune sin ningún tipo de comentario, hasta que se escucho un sonido fuera, salí y allí, junto a su Volvo plateado como todo los días estaba ese chico de ojos verdes, pelo cobrizo, piel blanca, cuerpo escultural, sin duda un modelo; Edward Cullen, el muchacho que me trae loca desde que me entere que me gustaban los chicos, el cual me era prohibido ya que era, mi mejor amigo.

-mama me voy-grite desde la puerta

-esta bien!

-hola hermosa!-dijo Edward, siempre me llamaba así, pero de igual manera, nunca me acostumbraba, así que inmediatamente me ruborice. 

-hola Edward, ¿como estas?

-bien, y tu?

-tambien

-Rene, como esta??

-bien, el embarazo la pone muy pesada sin duda, hoy me tiro de la cama para que me levantara 
El solto una carcajada

-que es tan chistoso?

-me gustaría poder haber visto tu cara!

-eres malo Edward, mejor vamos
Entonces, el como todo un caballero, me abrió la puerta del copiloto, era injusto que el pudiera tener auto porque tiene 17 años, y yo que tengo 16 no! 

-que injusticia que tu puedas tener auto y yo no! Tendre que decirle a Elizabeth que hable de eso con Rene y Charlie

-eso es porque tu eres una niñita!

-pero nada mas me llevas 1 año! Eso es injusto

-pero yo soy mas maduro que tu!

-yo soy mas madura que Quil

-pero todo el mundo es mas maduro que mi hermano Quil 

-bueno eso si-entonces empezamos a reir, la verdad que con el me siento completa, muy a gusto 

El resto del viaje la pasamos discutiendo acerca de mi madurez y la posibilidad de que tenga un auto nuevo, y obviamente el me dijo que era muy pequeña y que si quería el me llevaría a donde quiera porque es mi mejor amigo, y yo soy como su hermanita, eso si me dolio, y mucho!

-que pasa Bella?
Suspire, debería tener claro que nada mas el me quiere como su hermana, nada mas ni nada menos-nada

-te conozco, venga dime!

-no me pasa nada

-algun dia me lo diras?

-no lo se

-ok, tendre que sacártelo a la fuerza
Entonces llegamos al colegio, mi amiga Leah como siempre me estaba esperando en la entrada

-hola Bella!-dijo animada

-hola Leah 

-Ediie!-dijo bromeando

-sabes que odio que me digan Ediie!

-ho vamos! No seas aguafiestas 

-callate!

-ok, no se peleen, vamos a clase-dije interponiéndome entre Edward y Leah

-ok Bella, vamos, adiós Ediie!

-oye no me has contado como es que tu y el son tan amigos-dijo en cuanto íbamos en rumbo al aula

-es que nuestros padres son muy amigos, Rene y Elizabeth con las decoraciones, y Charlie y Anthony con el futbool y la pezca, ya sabes esas cosas, los dos nos conocemos desde que nacimos, somos como… 

hermanos-dije la ultima palabra como si me estuviera refiriendo al mismo demonio, no lo pude evitar 

-pero a ti no te gusta que sean como hermanos verdad?

-a ti para que mentirte, es la verdad, lo amo con todas mis fuerzas, desde siempre

-no, desde siempre no, te acuerdas que a los 12 te gustaba el cura, y yo te decía que era pecado

-Callate! En ese momento no sabia nada

-pero te gustaba el cura!-dije riéndose

-ya Leah, tendre que empezar a decir nombres

-no, no, no, me callo

-ok, asi me gusta

-pero cuando le diras?

-decirle que, a quien?

-decirle a Edward que estas tan…enamorada de el!-dijo suspirando dramáticamente

-nunca!
Ella estaba por reprocharme cuando sono el timbre, rápidamente corrimos por el pasillo hasta llegar a nuestros bancos, justo estaba el profesor quien nos miro mal por nuestra tardanza

La mañana paso prácticamente volando, en un descuido ya estaba en el aparcamiento esperando a Edward, quien no aparecia, a lo lejos pude ver a Jacob, unos de sus amigos, asi que me acerque a el

-hola

-wow, hola preciosa-dijo coquetamente, yo solo me ruborice, y me incomode por su atrevimiento

-sabes donde esta Edward?

-creo que ya se fue, es que salimos temprano

-ok, gracias

-un placer preciosa

Yo solo me aleje y decidi irme caminando a casa, era muy raro que Edward no me haya avisado, el siempre me dice todo lo que hace, y nunca me dejaría irme sola, no es que este incomoda ni que no me guste caminar, al contrario, solo se me hace muy raro que no me avise, el es muy protector; esto me da muy mala espina

-hola niñita-dijo una voz de mujer, me di vuelta y había una señora de pelo rojo y ojos… 
rojos?? Me incomode bastante

-que necesita señora?-pregunte cortez como siempre me ha enseñado mi madre

-solo quiero decirte que tienes que decidirte y decirle antes de que sea tarde, los accidentes pasan-me estremeci por su tono tan maligno, ni siquiera se a que se refiere

-a que se refiere señora?

-tu sabes a que me refiero, hay una sola vida-en eso se hecho a reir como de un chiste privado

-la verdad es que no la entiendo!-dije incrédula

-ustedes nunca entienden nada!

-mejor me voy, gracias por el consejo señora, lo tomare en cuenta!

-puede que cuando te decidas sea tarde, solo piénsalo!
Empece a caminar cada vez mas rápido, esta señora si que esta loca, pero de igual manera me puso muy nerviosa, me dio muy mala espina

¿porque me diria eso? ¿porque a mi? y ademas ¿que queria decir con eso?
de verdad me dejo muy confundida y un poco asustada......


espero les guste, besos